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El recorrido es una excelente oportunidad para descubrir las bellezas naturales cercanas a Sevilla. La ruta del agua es un recorrido de 68 kilómetros, pero el itinerario propuesto se centra en los 30 kilómetros más destacados.

Desde la Cuesta de la Media Fanega, frontera natural entre el Valle del Guadalquivir y Sierra Morena, el camino va al principio asfaltado junto al río Cala y pasa junto a dos estaciones eléctricas que sirven para abastecer a Sevilla: la de Guillena y la de Cala. Como curiosidad, destacar que aprovechan que la energía es más barata de noche para ascender el agua y luego, durante el día, volver a bajarla y producir una energía que a esas horas es más cara.

Entre especies vegetales como encinas y jaras, el camino sigue sin pérdida hasta la segunda instalación eléctrica, donde el firme cambia y pasa a ser de tierra.

Sigue la ruta hasta llegar a la Cantina, un bello lugar donde es posible reponer fuerzas antes de seguir pedaleando. Desde este punto, el camino se hace aún más sencillo y llano, con numerosos bancos y miradores colocados en puntos estratégicos desde los que disfrutar del paisaje.

Tras acabar la zona con especies vegetales, la ruta del agua sigue junto a campos de cultivo que desembocan en Guillena, punto final de nuestro recorrido