Parque de Los Alcornacales

Este trayecto lineal es perfecto para conocer en profundidad la esencia del Parque Natural de los Alcornocales y disfrutar de excelentes panorámicas. Permite ver ciervos y buitres, entre otras especies animales, y pasa por frondosos bosques de quejigos, de alcornoques y por arroyos con parras que superan en altura a los árboles.

Desde la zona recreativa del Picacho tomamos la carretera que une Alcalá de los Gazules con Puerto Gáliz hasta las casas de los guardas, junto a las cuales se observa el cartel “EVA nº 11”, una instalación militar.

Por un firme de asfalto se asciende durante cinco kilómetros, en algunos casos con rampas duras. El esfuerzo se recompensa sobradamente por las maravillosas vistas de la cercana cumbre del Picacho y por una suave bajada de 10 kilómetros que permite el deleite de las vistas a nuestra derecha, que alcanzan el mar en días claros.

Otra subida nos lleva junto al Tajo Sancho, donde se concentra una importante colonia de buitres. Acompañado del suave ruido del agua, el camino surca varios arroyos en curvas cerradas hasta llegar al arroyo Peguera, una galería boscosa muy frondosa.

Lucena Zuheros

Sencillo y agradable recorrido para conocer la esencia del aceite de oliva y su relación con el entorno serrano

Todo el itinerario, el único camino llano entre tanta sierra, transcurre por una antigua vía de tren en desuso que hasta el siglo pasado se dedicó, fundamentalmente, a la industria del aceite.

Saliendo de Lucena y entre viñedos de la famosa comarca Montilla-Moriles se sube poco a poco hasta Cabra. Rápidamente llegan los olivos, y en la estación de Cabra el Centro de Interpretación del Aceite ofrece la oportunidad de conocer todos los detalles del «oro líquido» que se produce en la zona.

El camino bien pavimentado sigue en leve ascenso junto a hermosas sierras hasta Doña Mencía, punto más alto del itinerario y cercano a Zuheros, precioso pueblo incrustado entre rocas con su famosa Cueva de los Murciélagos.

Otro atractivo en Zuheros supone el puente de la localidad, estructura metálica en curva situada a pocos metros del apeadero y que sirve para superar el arroyo Bailón, por donde es posible realizar un bonito paseo.

Vado del Quema – Sanlucar la Mayor

El recorrido permite disfrutar de un agradable paseo junto al río Guadiamar, llamado de los Príncipes por los árabes.

Saliendo del Vado del Quema, paso obligado para los peregrinos rocieros, el camino sigue junto al Guadiamar en dirección norte por frondosos pinares.

El río Guadiamar une la Sierra Norte de Sevilla con Doñana y sufrió en 1988 uno de los peores desastres medioambientales del país cuando una balsa de vertidos tóxicos de una mina de Aznalcóllar se rompió e inundó el río de material contaminante.

Para solucionar esa catástrofe natural se invirtieron grandes sumas de dinero, y entre los objetivos de esa restauración ambiental se incluyó el Corredor Verde por el que va nuestro camino.

Aún es posible ver la altura que alcanzó el río por las marcas que dejaron en los árboles el fatídico día en el que se rompió la balsa minera.

Durante el recorrido podremos hacer una parada en el centro de interpretación de Aznalcázar y en el jardín botánico El Buitrago antes de llegar a Sanlúcar la Mayor.

media fanega-guíllena

El recorrido es una excelente oportunidad para descubrir las bellezas naturales cercanas a Sevilla. La ruta del agua es un recorrido de 68 kilómetros, pero el itinerario propuesto se centra en los 30 kilómetros más destacados.

Desde la Cuesta de la Media Fanega, frontera natural entre el Valle del Guadalquivir y Sierra Morena, el camino va al principio asfaltado junto al río Cala y pasa junto a dos estaciones eléctricas que sirven para abastecer a Sevilla: la de Guillena y la de Cala. Como curiosidad, destacar que aprovechan que la energía es más barata de noche para ascender el agua y luego, durante el día, volver a bajarla y producir una energía que a esas horas es más cara.

Entre especies vegetales como encinas y jaras, el camino sigue sin pérdida hasta la segunda instalación eléctrica, donde el firme cambia y pasa a ser de tierra.

Sigue la ruta hasta llegar a la Cantina, un bello lugar donde es posible reponer fuerzas antes de seguir pedaleando. Desde este punto, el camino se hace aún más sencillo y llano, con numerosos bancos y miradores colocados en puntos estratégicos desde los que disfrutar del paisaje.

Tras acabar la zona con especies vegetales, la ruta del agua sigue junto a campos de cultivo que desembocan en Guillena, punto final de nuestro recorrido

Puerto Serrano-Olvera

El recorrido aprovecha el trazado de un tren que se hizo a principios del siglo XX, que nunca llegó a usarse y que fue rehabilitado como recurso turístico a finales del mismo siglo.

La Vía Verde incluye 30 túneles, alguno de casi un kilómetro de longitud, por lo que es imprescindible contar con luces en las bicis o disponer de linternas.

También es posible disfrutar durante el recorrido de cuatro viaductos, el más espectacular de ellos el del Peñón de Zaframagón, donde se concentra una de las mayores colonias de buitre de Europa.
El centro de interpretación situado en una antigua estación permite conocer con detalle la vida y costumbres de estas impresionantes aves. Las cámaras que los graban permanentemente facilitan la comprensión de su rutina y crianza.

La ruta comienza en Puerto Serrano, junto al río Guadalete, y el camino va en ligera y suave subida durante todo el recorrido, que no pasa por ningún pueblo hasta llegar al final en Olvera, donde la antigua estación ferroviaria ha sido rehabilitada como restaurante y hotel..

Tramo Constantina – Cerro del hierro

El mejor tramo de la Sierra Norte de Sevilla tiene la particularidad de que se puede recorrer en bici por cualquier persona. El recorrido perfectamente pavimentado comienza en la estación de tren Cazalla-Constantina, en uso.

El itinerario discurre junto al río Huéznar hasta su nacimiento en San Nicolás del Puerto, que tiene una playa fluvial en verano, desde donde continúa hasta el Cerro del Hierro, una joya de la minería ahora reconvertida en zona de escalada y de sugerentes paseos.

Desde la estación de tren se puede acceder a la Vía verde a través de la carretera que se dirige a San Nicolás y acceder por la zona de recreo Isla Margarita. Otra opción es pedalear por la otra orilla del río tras pasar el puente de la cercana carretera que va a Constantina.
Una vez en la Vía verde, el camino tiene un ligero y suave ascenso entre por bosque mediterráneo, puentes, encinas, un túnel y la frondosidad propia de los ríos. Un placer para los sentidos.

En el km 11 se llega a San Nicolás, pequeño pueblo en el que reponer fuerzas y conocer el curioso nacimiento del río brotando del suelo, y al final llegaremos al Cerro del Hierro, enclave mineral que fue explotado por los escoceses hasta el siglo pasado.